Si estás pensando en emprender y no tienes claro si dar el paso, este artículo te interesa.
Voy a contarte, con pelos y señales, la realidad sobre emprender, lo que nadie te cuenta sobre el emprendimiento, y así podrás decidir si dar finalmente el paso o no.
Conozco a muchas mujeres que están iniciando o quieren iniciar su emprendimiento pero les da miedo dar el paso, y es normal, lo desconocido da miedo y emprender es algo que no tiene ninguna garantía de éxito.
Así que voy a intentar despejarte algunas dudas:
- Emprender no es complicado: y suele ser así, muchas veces nos pensamos que iniciar un negocio es muy complicado y hay muchas trabas, pero normalmente es mucho más sencillo de lo que parece, así que lo mejor que puedes hacer es preguntar a alguien que ya esté emprendiendo, si puede ser en algo parecido a lo que tú quieres hacer, mejor, y que te cuente cómo lo ha hecho.
- Busca asesoramiento: tanto por la parte legal como por la financiera y fiscal. Esto de hacértelo tú misma no es nada recomendable, y pagar a una gestoría no es nada caro, solo la tranquilidad que te da el tener a alguien que sabe lo que tiene que hacer y cómo hacerlo, no tiene precio. Las leyes y la fiscalidad cambia constantemente, y como financiera que he sido toda la vida, a no ser que te encante estar al día de toda la normativa, lo mejor que puedes hacer es delegarlo. Llevar tú misma esta parte no te hará ganar más dinero, al contrario, te quitará tiempo para centrarte en lo más importante: vender.
- Tiene que gustarte vender: y si no es lo tuyo, entonces mejor ni te plantees ser emprendedora. Hay muchas maneras de aprender a vender, pero lo más importante es que conozcas muy bien las necesidades de tu cliente ideal y cómo tú puedes ayudarle a cubrirlas. Sin ventas no hay negocio, así que ya sabes, a vender se ha dicho!
- El 90% de los emprendedores fracasan en su primer proyecto: y esto no lo digo yo, sino los expertos que organizan el MBA de la Escuela de Negocios de Cámara de Valencia. Con esto no quiero quitarte las ganas de emprender ni mucho menos, sino que quiero que te quedes con el siguiente mensaje: lo normal es fracasar, y no pasa nada, estamos hablando del primer emprendimiento, lo que quiere decir que seguramente no habían validado bien su proyecto, no lo habían testeado, no habían hecho un producto o servicio mínimo viable o no les apasionaba lo suficiente como para aceptar las críticas y seguir intentándolo después de oir a su cliente ideal. Muchas veces nos enamoramos de nuestro proyecto sin preocuparnos de lo que quiere nuestro cliente, y eso es un error. Tienes que hacer un mínimo viable e irlo adaptando en función de lo que te dice tu cliente ideal, esa es la manera de dar en el clavo.
- Hay que tener mucha paciencia: y es que si esperas forrarte en poco tiempo, lo más probable es que pases a ser uno de ese 90% que hablaba más arriba. Las cosas de palacio van despacio y en el emprendimiento aún más, así que ármate de paciencia y aprende a esperar, Roma no se construyó en un día.
- Tiene que gustarte la inestabilidad: porque olvídate de cobrar lo mismo cada mes, nunca vas a saber lo que vas a cobrar por más predicciones que hagas, quizá con los años puedas acercarte bastante a una cifra, pero lo más normal es que no tengas ni idea de lo que vas a facturar al mes siguiente.
- La mentalidad es esencial: y esto es algo que yo aprendí después de emprender y me arrepiento. Nunca pensé que la mentalidad fuera importante, pero ser emprendedora significa estar constantemente en una montaña rusa, y aprender a gestionar tus emociones se convierte en algo básico. Si tú no tienes energía y no tiras para adelante, tu proyecto no avanza, ya que depende de ti, así que tienes que trabajar tu mentalidad y ser fuerte, nadie lo va a ser por ti.
- Emprender es bastante solitario: a no ser que vengas de una familia de emprendedores, te vas a sentir bastante sola en esto, vas a ver que tu entorno no te entiende y muchas veces vas a tener ganas de sucumbir a los consejos que te dan tipo: búscate un trabajo de verdad. Pero no, tienes que buscar aliados, únete a un club de emprendedoras, vete a un Coworking, busca comunidades de emprendedoras afines a ti, apúntate a una asociación de emprendedores. Lo mejor es rodearte de personas que piensan como tú, que ya han pasado ese proceso y que te muestran que es posible vivir de emprender, ellas mejor que nadie te mostrarán el camino.
- Cuidado con los vendehúmos: y es que es esencial que busques personas, mentores, que te enseñen cómo conseguir lo que quieres, personas que están dónde a ti te gustaría llegar y que te muestren el camino, pero no te creas a aquellos que prometen cosas milagrosas, piensa que si fuera verdad, todo el mundo estaría forrado, así que antes de contratar algo, pregunta, busca, compara y asegúrate que eso es para ti. Además también tienes un artículo en mi blog en el que te lo explico detalladamente: https://sandrafp.com/como-detectar-a-un-vendehumos-en-el-mundo-digital/
- Tienes que ponerte con tus finanzas regularmente: y la excusa de “es que soy de letras” mejor te la guardas, porque así ya te aviso de que vas mal. Si emprendes tienes que ser la jefa de tu negocio y de tus números, y he visto fracasar negocios de éxito por no revisar sus cifras. No saber lo que ganas, lo que gastas, no llevar un control exhaustivo de tus números y no poder hacer previsiones de futuras inversiones hará que fracases, así que si no te gustan los números, busca ayuda, busca a alguien que te enseñe lo básico para poder gestionar tus finanzas de manera fácil, que al final no es nada complicado, solo hay que ponerse.
- No te compares: porque ahí vas mal, si te comparas con otros emprendimientos o emprendedores, lo más seguro es que te frustres. No conoces su trayectoria, su vida, la ayuda que tienen, el respaldo económico que hay, etc. Es bueno fijarte en alguien como inspiración, pero evita compararte, ya que solo te creará ansiedad por no alcanzar lo mismo, y cada persona y cada emprendimiento es distinto.
- Busca plan B, C, D…Y es que, como te he dicho ya, lo más seguro es que el primer emprendimiento no funcione, pero no pasa nada. Si tienes bien a ralla tus números, si tienes ahorros, o distintos planes de emprendimiento, si escuchas bien a tu cliente ideal y buscas ayuda, seguramente lo consigas. Pero busca alternativas que te den la seguridad y la confianza de poder conseguir tu objetivo, no tires la toalla a la primera de cambio, porque entonces demostrarás que no estabas hecha para esto.
- Rectificar es de sabios: y si ves que, una vez has iniciado tu emprendimiento, no te sientes feliz, entusiasmada, no ves que sea la única manera en la que te ves viviendo, entonces vuelve a un trabajo por cuenta ajena, que es tan válido como emprender. No todo el mundo está hecho para emprender, igual que no todos tenemos que tener una carrera universitaria, así que si hay que volver a lo de antes, hazlo convencida y con ganas.
Espero que este artículo te haya despejado algunas dudas y ya sabes que si necesitas a alguien que te ayude con tu proyecto, tienes mis packs de servicios: https://sandrafp.com/packs-servicios/ o mi programa grupal: https://sandrafp.com/programas/programa-acompanamiento-conexion-emprendedora/ para que juntas podamos conseguir que vivas de tu emprendimiento de una manera organizada y con un plan.